11 ago 2015

Traición

Una amiga, en las RRSS, habla de traición.
- ¿Tomas algo para ser feliz?
- Sí, decisiones.
Yo prefiero hablar de lealtad, de confianza, de compromiso, de no fallar, de decidir, de pensar, de meditar... Pero más que hablar, prefiero demostrarlo.
Y con mi silencio, he tomado la decisión que me lleva a la calma, al sosiego, a la observación, al pensamiento, a la meditación. Me libero de lo que daña, y de lo que me hizo daño. Me centro en lo que me queda por vivir, en la gente que se queda a mi lado, en la gente que llegará (y con esto, no hablo de volver a enamorarme, que lo estoy, sino de hombres y mujeres que me harán ser mejor cada día). 
Mi meta, mi sueño, no pasa por quiénes me asfixian, me ahogan, me fallan. Mi meta pasa por seguir siendo como soy, por luchar por lo que creo (por las ideas que tengo y mantengo, y también por descartar las ideas que no me sirven para nada) y por lo que creo (por aquello que construyo, con mayor o menor acierto, pero insistiendo para conseguirlo).
En mi vida, y en mis sueños, sólo manda el corazón. No hay más intereses (ni visibles, ni ocultos).
Voy hacia dónde mi corazón me lleva...


No hay comentarios :

Publicar un comentario